Esta impresionante finca, originalmente construida con un encanto tradicional, fue sometida a una amplia renovación en 2016, fusionando su carácter auténtico con mejoras arquitectónicas contemporáneas diseñadas por un reconocido estudio de arquitectura. Esta propiedad excepcional es una combinación armoniosa de historia, lujo y naturaleza?un refugio único donde el encanto tradicional mallorquín se encuentra con la sofisticación moderna.
Ubicada en una extensa finca de 40.000 m², la propiedad cuenta con una casa principal de 273 m², una casa de invitados independiente de 100 m², y una atractiva combinación de terrazas cubiertas y descubiertas. Una magnífica piscina de 12x4 metros se extiende hacia el paisaje pintoresco de colinas y montañas en la distancia, ofreciendo un refugio de serenidad.
Al entrar, la planta principal te recibe con un amplio espacio diáfano, que conecta a la perfección un elegante comedor formal con una cocina moderna equipada con una isla de diseño y electrodomésticos Gaggenau de alta gama. En este nivel también se encuentra un baño de cortesía, un lavadero, y un espacio versátil que puede utilizarse como quinto dormitorio o despacho.
En el ala opuesta, tres espaciosas habitaciones en suite ofrecen acceso directo al exuberante jardín, creando una perfecta integración entre el interior y el exterior.
Detalles arquitectónicos como los techos de más de 3 metros de altura, suelos de microcemento, una pared de piedra vista, y una chimenea de doble cara, aportan un ambiente refinado y exclusivo. Amplios ventanales enmarcan impresionantes vistas a los jardines, inundando la casa de luz natural.
El nivel superior está completamente dedicado a una suntuosa suite principal, que cuenta con una zona de estar privada, vestidor, y dos baños en suite, garantizando el máximo confort y privacidad. Desde este refugio se accede a una terraza privada de 38 m², que ofrece múltiples posibilidades de relax y entretenimiento.
El exterior es un oasis privado, con jardines maduros y un perfecto equilibrio entre zonas de descanso sombreadas y soleadas. Varias áreas de comedor al aire libre invitan a disfrutar de la vida exterior, mientras que la piscina infinita de agua salada ofrece vistas ininterrumpidas a la finca, con las montañas como telón de fondo.
La propiedad también cuenta con una parcela vallada, un huerto, y dos accesos principales para vehículos bordeados por majestuosos olivos. La casa de invitados, completamente independiente de la residencia principal, dispone de su propia piscina privada, proporcionando total privacidad a los visitantes. Además, existe la posibilidad de completar una extensión adicional de 100 m², ofreciendo aún más opciones de personalización.